Análisis Kobo Libra Colour: el libro electrónico vitaminado que querrás tener

¿Se puede mejorar un producto excelente? Sin duda, sólo hay que añadir algunos extras y se puede convertir en un imprescindible. Rakuten parece haberlo tenido claro a la hora de lanzar el Kobo Libra Colour: sólo había que poner una pantalla a color y dos o tres mejoras casi imperceptibles y con eso se consigue un libro electrónico casi perfecto. Hemos estado probándolo durante unas semanas y si te estabas preguntando si era para ti, has llegado al sitio correcto. Sigue leyendo para saberlo.

Ficha técnica

En la caja

Si la del Libra 2 ya nos pareció una caja de excelentes características, con un producto cuya presentación era totalmente acorde a su calidad, la del Libra Colour nos parece incluso mejor.

La calidad del packaging no tiene pega posible; buen cartón, diseño vistoso, buena presentación del producto en el interior de la caja y una forma de presentar el cable de carga mucho más atractiva y "de gama alta" que en el Libra convencional, muy al estilo iPad.

En el interior de la caja, tenemos el libro electrónico, por supuesto, con película protectora plástica para la pantalla y una lengüeta de cartón bajo él para extraerlo cómodamente de la caja. Tenemos también un escueto libro de instrucciones, suficiente y muy bien presentado, con portada a color. También se incluye la carta de garantía y como en bajo una pequeña pestaña de cartón, encontramos como decimos el cable de carga, de tipo USB-A a USB-C, sujeto por una faja de cartón.

La marca nos ha cedido junto al Kobo Libra Colour el lápiz electrónico Kobo Stylus 2, compatible con el mismo, que viene en una caja independiente, con el propio lápiz, instrucciones y un par de puntas de recambio, y la SleepCover, una cubierta protectora integral, con tapa magnética y sistema de plegado para hacer las veces de atril o soporte vertical para el libro. Ésta viene en un envoltorio de cartón que deja ver parte de la misma, y se puede elegir en varios colores.

Diseño

Cualquiera que ya conozca el Libra sentirá que está ante el mismo producto, al menos mientras lo esté contemplando apagado. Lo cierto es que el Libra Colour repite los aciertos del modelo convencional y subsana algún "problema" que ni sabíamos que existiera.

Así pues, se mantienen un diseño asimétrico, ideal para usar el eReader tanto en vertical como en horizontal, con pantalla táctil de 7 pulgadas y dos botones en la parte delantera, en un lado más grueso del marco, ideal para apoyar el pulgar y con esos botones permitiéndonos pasar páginas sin tener que recurrir a la pantalla táctil.

El lado más ancho junto a la pantalla, tiene un diseño curvo que lo hace muy cómo de coger y mantener en la mano mientras leemos.

La parte trasera trae un diseño microperforado con un motivo diferente al del modelo original. El botón de encendido se mantiene en el mismo lugar y viene con el mismo relieve cóncavo original, para evitar pulsaciones no deseadas y permitir que lo encontremos fácilmente con el tacto, incluso a oscuras.

Además, del diseño de la microperforación trasera, el Libra Colour se diferencia del Libra 2 también se diferencia del modelo en blanco y negro por contar con un acabado más redondeado en el borde del lado ancho junto a la pantalla. Esta acabado lo hace mucho más cómodo en mano, al menos si lo usamos sin funda. Con ella pasará incluso desapercibido.

El puerto de carga y sincronización USB-C se ha movido ligeramente hacia el centro del lateral, pero hay que decir que este detalle ni afecta al uso del dispositivo ni nos será notable a no ser que tengamos los dos modelos en la mano.

En cuanto a las dimensiones y el peso de este eReader, cabe decir que tiene el tamaño perfecto, con 144,6 x 161 x 8,3 mm, prácticamente las mismas medidas que el modelo convencional aunque mejora ligeramente en grosor, y también en peso, con unos gramos menos, 199,5 g concretamente (frente a los 215 del Libra 2).

Hardware

En lo que hardware respecta, este Kobo nos ofrece una pantalla E Ink Kaleido táctil y a color, con 7 pulgadas con 1264 x 1680p y 300 ppp cuando muestra contenidos en blanco y negro y 150 ppp cuando son a color. Es sin duda el alma del dispositivo. Cuenta con brillo y calidez ajustables, que podemos configurar en automático gracias al sistema ComfortLight Pro, apoyado en el sensor de luz ambiente que lleva sobre los botones frontales.

La marca no declara el procesador, aunque aclara que cuenta con dos núcleos y funciona a 2.0 GHz. En este sentido, podemos afirmar sin miedo que es mucho más rápido y ágil que el del modelo convencional.

Junto a este, encontramos una capacidad de almacenamiento de 32 GB: es más que suficiente para almacenar montones de libros y PDFs o incluso fotos en JPG.

El Libra Colour es también resistente al agua, con certificación IPX8, por lo que no debemos temer si lo llevamos a la piscina con nosotros, o si nos pilla por sorpresa un chaparrón si estamos leyendo al aire libre.

Su batería tiene una capacidad de 2.050 mAh. Para ella, la marca declara semanas de autonomía, y podemos decir que no exageran. Llevamos un mes probándolo y no ha pasado aún por el cable de carga, aunque hay que tener claro que esta cifra es muy variable; todo depende de si tenemos activada su conectividad inalámbrica, de si usamos la pantalla con mayor o menor brillo y de otros factores.

En ese sentido, cabe decir que este eReader nos ofrece conectividad Wi-Fi 802.11 ac/b/g/n y Bluetooth. Además, el puerto de carga USB-C también nos servirá para sincronizar contenidos desde nuestro PC o Mac.

Por último, decir que es compatible con una buena lista de tipos de archivos: EPUB, EPUB3, FlePub, PDF, MOBI, JPEG, GIF, PNG, BMP, TIFF, TXT, HTML, RTF, CBZ y CBR, y como ya ocurriera con el modelo convencional, con él podemos incluso consumir audiolibros siempre que los descarguemos desde la store de Rakuten.

Uso y prestaciones

Sin aparte alguno: el aspecto de la usabilidad es excelente en el Libra Colour. Es una verdadera delicia. Al menos cuando hablamos de leer libros. Otros formatos si necesitan algunos matices.

Es un libro de lo más completo que nos hará todo muy fácil. Desde el momento en que queramos transferir nuestros propios archivos hasta el de comprarlos en la tienda de Rakuten.

Para dotarlo de contenido, sólo tenemos que conectarlo a nuestro PC o Mac usando el cable USB. Con esto, el ordenador lo reconocerá automáticamente, sin instalaciones de software extra, y ya podremos enviar los archivos que deseemos como si de una carpeta más se tratara. Pero claro, además de la posibilidad de comprar en la tienda de Rakuten, no se quedan ahí nuestras opciones.

El Libra Colour es compatible con Dropbox y Google Drive además de con Pocket. Podemos enviar nuestros libros a nuestra carpeta de las nubes de ambas empresas o marcar con Pocket cuando navegamos en el ordenador o el móvil, para leer después lo que hayamos sincronizado con nuestra cuenta del servicio.

Eso sí, no podremos usar los libros que hayamos comprado en Amazon, debido al DRM: no es un problema del dispositivo, sino de exclusivas de una y otra tienda.

Una vez tengamos algo que leer, nuestra biblioteca se podrá organizar como deseemos; en lista, en cuadrícula, por colecciones, autores, títulos... Navegar por ella es simple gracias a la pantalla táctil que ofrece una respuesta muy buena, aunque no llega al nivel de lo que ofrece una tablet, claro.

A diferencia del modelo en blanco y negro, en este caso no podemos ajustar el brillo deslizando el dedo por la pantalla hacia arriba o abajo. Para hacerlo tendremos que acceder al menú de la parte superior de la pantalla de lectura. No es complicado, pero no es tan rápido e intuitivo.

El sistema de navegación por los libros sí que es muy intuitivo. Cuando tenemos abierto el título que vamos a leer, pasar página es sólo cuestión de deslizar el dedo de derecha a izquierda, tocar el lado derecho de la pantalla o pulsar el botón frontal inferior, da igual si tenemos el libro cogido con los botones a izquierda o a derecha, ya que al orientarse automáticamente, siempre sabe cuál es el botón "de arriba y el de abajo". Retroceder páginas se hace de manera inversa, tocando la izquierda, deslizando de izquierda a derecha o pulsando el botón superior.

Los botones físicos, como ya nos parecieran en el Libra, son todo un acierto, sobre todo colocados en el lateral, más de lo que nos parecería que estuvieran bajo la pantalla. Siempre están a mano, asiendo el libro con una postura mucho más cómoda. Nos permiten pasar página intuitivamente, incluso a oscuras o con guantes puestos.

Como habrás intuido por lo dicho un poco más arriba, el libro detecta automáticamente cuando lo queremos usar en horizontal o vertical, al igual que si lo tenemos cogido con los botones a la derecha o a la izquierda.

El sistema operativo se mantiene del modelo en blanco y negro, aunque en este caso incorpora algunas funciones nuevas, como la de la libreta, que es todo un acierto a la hora de tomar notas.

Es ahí donde entra en juego el Stylus 2, que nos sirve para ello y por supuesto, para subrayar y anotar sobre libros y PDFs, haciendo que el Libra Colour sea un dispositivo ideal para estudios y trabajo y no sólo para el ocio y tiempo libre.

La precisión del Stylus es muy buena, y los menús con que cuenta, con diferentes tipos de puntas y colores para señalar son más que suficientes. La sensibilidad de éste es también destacable. En la parte superior cuenta con el equivalente a una goma de borrar y eso sí, ofrece algún problema de uso.

Por un lado, cuando lo estamos empleando sobre la pantalla, es fácil apoyar la mano y accionar menús de manera no deseada. Si no la apoyamos, es muy incómodo tratar de escribir o realizar esquemas completamente a pulso, con la mano en el aire y apoyando sólo la punta del lápiz. Por otro lado, el lápiz cuenta con un botón para un trazo secundario, que nos sirve para subrayar o colorear. El problema es que este botón está muy abajo, en la parte por la que se coge el lápiz, y esto hace que lo pulsemos sin quererlo muy a menudo.

Sea como sea, el lápiz es un complemento ideal para un dispositivo tan polivalente como este.

Mencionar también la SleepCover, otro excelente complemento que aporta protección, delantera y trasera, y que además, con su cierre magnético activa la pantalla (o la desactiva) cuando tenemos el eReader en modo reposo, tal y como lo haría la cubierta de una tableta.

Además, cuenta con unas nervaduras que nos permiten plegarla para hacer de ella un soporte vertical para poder leer sin manos, apoyando el dispositivo sobre la mesa. Y no sólo eso, también permite sujetar magnéticamente el Stylus al lateral.

Interfaz y configuración

La interfaz del Kobo Libra Colour es bastante intuitiva, fácil de usar y responde a la perfección. Los menús además están correctamente colocados y es fácil navegar por ellos sin perderse. Con apenas unas horas de uso sabremos donde tenemos cada función y podremos acceder a ella sin perdernos.

Si que, como ya ocurriera con el modelo original, no nos ha gustado el hecho de tener que activar el modo oscuro, navegando por uno de los menús. Nos parece una función que, como en la mayoría de tablets, debería activarse automáticamente, cuando el sensor de iluminación detectara que estamos a oscuras, o programarlo a una hora concreta para que se active automáticamente. Es uno de esos detalles que haría al dispositivo incluso más completo.

Los menús de lectura y configuración se reparten entre la parte alta y la baja de la pantalla. Abajo encontramos las secciones principales del libro, con Inicio, Mis Libros, Mis Libretas, Descubrir y Más. Son los accesos a la tienda Rakuten, a nuestros propios libros ya adquiridos o transferidos, a las libretas de notas tomadas a mano, a propuestas de la tienda Rakuten según nuestros gustos y preferencias a una lista de opciones como las de acceder a nuestro Dropbox, Drive, la actividad de lectura y otras en fase beta, como el navegador web.

Mientras, en la parte de arriba, y disponible en todos los menús principales, tenemos a la izquierda un reloj, y a la derecha, una línea de menús con ajustes para la pantalla y otros aspectos de la lectura (brillo, calidez de éste, configuración de pie de página, acceso al modo oscuro, tamaño de fuente, conectividad WIFi y más).

Autonomía

El de la autonomía es otro apartado sobresaliente (más) en este dispositivo. Como ya hemos comentado, con una única carga podemos conseguir semanas de uso. Ya hemos dicho que llevamos más de un mes de uso sin cargar la batería, con un uso tan intensivo como el que suele tener un dispositivo que estamos probando a fondo.

Podemos irnos de vacaciones sin miedo, que es muy posible que no necesitemos el cable USB-C para el Libra Colour.

Influye mucho, eso sí, el brillo de la pantalla y el tener la conectividad desactivada. Sobre todo esta última, aunque si no estamos transfiriendo archivos muy a menudo, podemos dejar la WiFi desconectada para alargar la autonomía.

Kobo Libra 2 o Kobo Libra Colour, ¿cuál elegir?

El precio oficial del Libra 2 es de sólo 30 euros más bajo que el del Libra Colour, por lo que sólo recomendaríamos comprar el modelo en blanco y negro si encontramos una buen oferta en alguna tienda, online o física.

Con el Libra Colour podremos tomar notas, (en el convencional no, o al menos no fuera de un modo Beta). También es el modelo ideal si somos asiduos a PDFs a color, cómics o novelas gráficas, está claro que también debemos decantarnos por él.

Si sólo queremos leer novelas y títulos sin contenido gráfico, con el Libra 2 tendremos más que suficiente y no tendremos que pagar el sobreprecio que supone el modelo a color, aunque como decimos, por la diferencia actual, quizás no convenga ni planteárselo.

Además, el Libra Colour es más ágil y rápido, carga en menos tiempo y nos permite tener un libro abierto en una fracción de tiempo que la que necesita el Libra 2. Pero ojo, que eso no hace al modelo en blanco y negro un eReader peor: ya nos pareció una base excelente sobre la que sólo se han mejorado varios aspectos en modelo a color. Si con el tiempo se ajusta un poco más su precio, será una decisión mucho más complicada.

Precio y conclusiones

El precio oficial del Libra Colour es de 229,99 euros, algo elevado, pero hay que tener en cuenta que su competidor más directo, el Kindle Scribe, al que nos parece que adelanta en algunos aspectos, es incluso más caro (369 euros).

Eso sí, su precio es elevado si lo comparamos con otros libros electrónicos más básicos, incluso de la propia marca. De todas maneras, si nos decidimos a comprarlo, podemos tener claro que estaremos gastando bien nuestro dinero.

Con él tendremos una experiencia absolutamente positiva y sólo nos sentiremos un poco frustrados si queremos sacar provecho del Stylus, que como ya hemos comentado, a veces no va todo lo fino que nos gustaría, aunque de cualquier forma, no todo el mundo se hará con él, dado su precio de 69,99 euros.

Es un libro electrónico cómodo en la mano, pesa poco, se puede llevar incluso en bolsillos grandes, (como los laterales de los pantalones cargo), y resiste el agua. Es además muy fácil de sincronizar y le caben infinidad de títulos, con una batería que hará que el cable de carga se nos olvide en ocasiones. No se le puede pedir más a un dispositivo como este.

Este producto ha sido cedido por la marca para la prueba. 
Tienes más información sobre el Kobo Libra Colour en la web de Rakuten

Imágenes | Rakuten, Manu García

En Compradicción: Análisis Kobo Libra 2: toda una biblioteca en la palma de la mano

En Compradicción: Análisis NiPoGi CK10: un pequeño pero matón mini PC que puede con casi todo