Tras la subida de del IRPF y el IBI, la renta disponible de las familias españolas se ha deteriorado más si cabe, justo en el momento en el que en muchos hogares hay algún miembro en el paro, e incluso, más de un millón de familias con todos sus miembros sin trabajo.
La opción que ha impuesto el gobierno ha sido la de incrementar la imposición directa, una alternativa en la que las familias no pueden hacer nada para 'esquivar' la subida de impuestos, por lo que ha resultado más lesiva que otras opciones como la de por ejemplo incrementar el gravamen de la imposición indirecta vía IVA e impuestos especiales. Ya que en esta otra opción modificando ciertos gastos, o reduciendo el consumo de algunos bienes y servicios, podríamos haber salido más o menos ilesos, aunque también es cierto que hay poco margen para desprendernos de ciertos gastos.
En definitiva, sin ánimo de entrar en debates, esta medida ha supuesto que las familias contarán con menos dinero, y sin poder hacer nada al respecto, comenzamos un año en el que muchas familias deberán hacer 'malabares' para llegar a fin de mes sin una cuenta corriente en números rojos.
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En Ahorro Diario | Cada vez hay que pensarse mejor en qué Comunidad Autónoma fijamos nuestra residencia fiscal