En los últimos años, al calor de los sucesivos incrementos del precio de los carburantes, se ha ido incrementando el tono del debate a este respecto. Alimentado por el ya conocido efecto de 'Cohetes y plumas', es decir, las rápidas subidas de su precio cuando se incrementa el precio de petróleo y la lenta caída del mismo, cuando sucede justo lo contrario.
Dado el clamor social sobre esta materia, parece ser que el Gobierno de la nación quiere poner coto a esta situación controlando la fijación de precios que llevan a cabo las gasolineras, con el objetivo de tratar de determinar que los incrementos de los precios se atienen a razones objetivas. Según afirma el propio gobierno:
Eliminando los impuestos, el coste de los carburantes para los consumidores españoles es de los más altos en Europa
En los próximos meses tendremos que estar atentos a las iniciativas que se formulen al respecto, porque lo que es cierto es que mientras la mayoría sufrimos un encarecimiento desmesurado de los precios de los carburantes, otros se están aprovechando de la situación, enriqueciéndose aún más que en los años previos a la crisis económica.
Imagen | daquellamanera
Vía | El Mundo
En Ahorro Diario | El precio de los carburantes está por las nubes