Desgraciadamente casi todos los días escuchamos nuevas noticias sobre recortes presupuestarios que tocan muy directamente al día a día de las familias españolas, como es el caso que el último ajuste que ha llevado a cabo el gobierno regional de Castilla la Mancha, que ha efectuado un recorte del 42% del presupuesto asignado para la partida de comidas en residencias de mayores y discapacitados. Aumentando al mismo tiempo nada más y nada menos que un 49% el importe que han de satisfacer los mayores por ocupar una plaza pública en una residencia de mayores.
Una asistencia social muy necesaria, y que en la mayoría de los casos está asociada a familias que no disponen de los ingresos suficientes para cuidar de una forma adecuada de los familiares que requieren asistencia. Esta situación obligará a muchas familias (las que puedan) a ‘tirar’ de sus propios ahorros, y en otros casos a buscar otras fórmulas, cada vez más escasas, para poder afrontar determinados gastos.
A causa de este recorte, y de otros relacionados que se están llevando a cabo a lo largo de todo el país, se está apreciando un cierto fenómeno de retorno de los mayores a los hogares, que al existir miembros en paro y el aumento del coste de este tipo de servicios, cada vez son más los españoles que deciden cuidar de los mayores en casa a optar por la socorrida opción de una residencia.
Imagen | ppcantabria
Vía | La cerca
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