Una de las recetas de toda la vida ideales para aprovechar los restos de carne que tenemos en la nevera es la Carne de pobre. Muchos la conoceréis por otros nombres como Pelota, pero en mi casa siempre se ha llamado Carne de Pobre (motivo por el cuál tuve un trauma enorme en mi infancia y hasta hace bien poco no he sido capaz de comer ese plato, en fin, confusiones tontas de los niños).
La receta es muy sencilla: se desmenuzan todos los restos de carne que tenemos guardados (pollo, carne cocida, jamón o jamón york), se pica un poco de ajo, se ralla pan que tengamos del día anterior, se añade perejil y sal y se prepara un revuelto con todos los ingredientes.
Una vez preparada esa especie de tortilla, se echa en el cocido. Así, la carne le da sabor el cocido, al mismo tiempo que la carne de pobre se empapa bien del caldo del cocido.
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Por último, cuando esté el cocido en su punto, se saca la carne de pobre y se escurre bien, sirviéndose con el resto de sacramentos que hayamos añadido al cocido: costilla, chorizo, morcilla, etc.
Foto | Manolo López En Ahorro Diario | Las sobras y los restos de comida también sirven para hacer nuevos En Directo al Paladar | Receta de cocido con pelotas