El avance de la crisis económica está llegando hacia límites que parecían absolutamente recónditos, afectando a un número cada vez mayor de ciudadanos, que suponen verdaderos dramas. Este impacto es especialmente importante en los denominados 'países periféricos' de la Eurozona, es decir, Grecia, Irlanda, Portugal, Italia y España.
En este contexto una noticia que me ha llamado mucho la atención es la del caso de un padre de familia portugués que en un supermercado de oporto se negaba a pagar por una pequeña compra de alimentos básicos por un importe de 4 euros, y que tras llamar a la policía la gerente de este, un policía se ofreció a pagar este pequeña cantidad.
Lecturas como esta confirman que, desgraciadamente, la pobreza va en auge, pero como contrapartida podemos afirmar que cada vez somos más solidarios, ya que comenzamos a apreciar que cada vez es más posible que algún día nos pase a nosotros o a personas de nuestro entorno.
Imagen | editorialj Vía | eusouportugues En Ahorro Diario | Tener mucho dinero nos aleja más pero no evita la ruina