Todos conocemos que los aparatos electrónicos y los 'gadgets' cada vez avanzan a un ritmo más acelerado, lo que lleva a que los modelos predecesores queden pronto desfasados. Un proceso que se conoce como obsolescencia programada, y que nos impide que un aparato que compremos hoy nos pueda durar para siempre.
Pues bien, este es un proceso que se sabe que existe, pero, ¿siempre que renovamos un cierto aparato se debe a esto? O dicho de otro modo, ¿lo cambiamos porque es realmente necesario o se trata de un capricho?
Pues bien, debemos de ser conscientes que cambiar algo por capricho puede ser un gasto que nuestro presupuesto no se puede permitir, o no se debe permitir. Porque todos conocemos casos en los que hay ciudadanos que prefieren 'recortar' en gastos más necesarios como formación, alimentación o vestido, y sin embargo no escatimar en un nuevo Smartphone, ordenador o Tablet, incurriendo en un gasto sin sentido. ¿Creéis que esto se da mucho en vuestro entorno?
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