Todos sabemos que en las grandes ciudades es muy difícil encontrar productos de calidad como en los pueblos, además de ser allí mucho más baratos.
Productos como los embutidos, quesos, postres tradicionales, etcétera. Son fabricados mediante métodos tradicionales, con menos aditivos, colorantes y conservantes que los que podemos encontrar en los establecimientos de las grandes cadenas de distribución.
Como ya hemos comentado, su precio también suele ser inferior, pudiendo adquirir mayores cantidades de producto a un coste menor. Por ello, cuando viajemos a las zonas rurales, sería conveniente tener esto muy en cuenta, para así poder disfrutar en casa de los sabores más auténticos. En fín, si ya hemos hecho el gasto de viajar, ¿porqué no rentabilizarlo?
Imagen | arrozconnori
En Ahorro Diario | Los productos frescos, mejor en pequeños comercios