Amazon Prime, ¿merece la pena la suscripción?

Con el Prime Day a la vuelta de la esquina, quizás te estés preguntando si merece la pena pagar la suscripción de este servicio premium de Amazon. Si es así, aquí te vamos a desgranar las ventajas y quizás desventajas de tenerlo, para que sepas lo que te vas a encontrar.

Como ya sabrás, hablamos de un programa de Amazon mediante el cual, con un único pago de 19,95 euros 36 euros al año, tendrás acceso a una serie de privilegios y servicios que, sin duda te ahorrarán dinero, sobre todo si eres comprador habitual de la tienda.

Las ventajas de Prime

Lo primero que te atraerá es tener los gastos de envío de todos los pedidos de productos de la propia Amazon, marcados como Prime, y de algunos qua aparecen marcados con inscripciones como “Envío gratis (2 días) para clientes Prime” o similares.

Esto que, a priori parece tan interesante, sobre todo si pedimos a menudo, hay que sopesarlo bien, porque, como sabrás, los artículos vendidos por Amazon cuyo precio supera los 29 euros ya llevan los gastos de envío incluidos, así que no encontraremos demasiada ventaja si el de los envíos gratis es el aspecto que más nos preocupa, a no ser que seamos “compradores compulsivos de minucias” y productos baratos, como por ejemplo cargadores y otros accesorios para el móvil, productos chinos, etc…

También baja el precio para los envíos en el mismo día de los que disfrutan capitales como Madrid y Barcelona. De 9,99 euros, pasan a costar 6,99.

La otra ventaja de Prime en lo que a envíos se refiere, se centra en el aspecto del tiempo de envío, pudiendo conseguir envíos incluso para el día siguiente. Pero ojo, que no por ser Prime todos los productos van a estar en nuestra puerta mañana mismo. Sin ser usuarios Prime, el envío mínimo es de 2 a 3 días; mínimo. De esta forma, nos aseguramos unos plazos más ventajosos, aunque no siempre se cumple el envío en 1 día.

Los artículos que no disfrutan de las ventajas de Amazon Prime en lo que a envíos se refiere, ni por tiempo ni por precios, suelen ser los de vendedores externos, que llevan sus propias condiciones.

Por otro lado, también tendremos acceso prioritario a ofertas y eventos puntuales. Así, las ofertas flash, ventas de moda especiales aumentando nuestras posibilidades de conseguir el típico artículo que vuela en cuanto sale rebajado, e incluso el propio Prime Day, sólo está disponible para usuarios Prime.

Por otro lado, los productos en preventa, como los smartphones de gama alta que se promocionan antes de su día de lanzamiento, estarán en nuestro hogar el mismo día en que salen al mercado.

Series y películas, fotos y música

Y luego tenemos servicios como Prime Video, que nos ofrecen un servicio similar al de Netflix o HBO, aunque algo menos cuidado, con series y películas propias, como por ejemplo Goliath, Mozart in the Jungle, o The Grand Tour, que no llegan a lo que nos ofrecen otros servicios de televisión, pero se complementan con una gran variedad de producciones externas, generalmente de muy buena calidad y en continua renovación, aunque con algo de desfase de tiempo con respecto a sus estrenos.

También tenemos Amazon Prime Photos, que nos ofrece algo así como Google Photos; un servicio de almacenamiento en la nube, ilimitado, para nuestras fotos, que, por ejemplo, nos servirá para salvar nuestras fotos incluso en el mismo momento en el que las estamos haciendo.

Twitch Prime por su parte nos ofrece un punto de encuentro social para jugadores, en el que mostrar nuestras partidas y ver vídeos de otros jugadores. Canales, chat, descuentos en vídeojuegos, preventa de éstos… Son algunas de sus otras posibilidades.

Y no nos olvidamos de Amazon Prime Music, que trata de ser un Spotify, con un 2 millones de canciones incluidas “de serie” en nuestra suscripción, aunque tenemos la opción de pagar 9,99 euros al mes para tener Amazon Music Unlimited, con 50 millones de canciones o de pagar 14,99 para tener acceso familiar, para 6 usuarios, al estilo de Spotify Premium.

¿Merece realmente la pena?

Dicho todo esto, seguro que si el servicio de vídeo o de música nos interesan, los “20 euros”36 euros al año de Amazon Prime nos saldrán a cuenta. Si por otro lado somos de hacer pedidos a la tienda de Amazon, con sólo hacer 7 pedidos dentro de los gastos de envío que se suelen cobrar, de 3,99 euros, estaremos amortizando nuestra inversión sin siquiera hacer uso de los otros servicios.

En cuanto a suscribirnos, sólo tenemos que usar nuestra cuenta de Amazon y seguir las instrucciones.

Tenemos 30 días de prueba gratuita, tras los cuales, y usando el método de pago que proporcionaremos al darnos de alta, se nos cargarán automáticamente los 36 euros en nuestra cuenta.

Por supuesto, podemos cancelar nuestra suscripción en cualquier momento, aunque si hacemos el primer pago, no tiene mucho sentido hacerlo hasta que no transcurra el primer año. Podemos hacer uso de la prueba gratuita y cancelar una vez concluido el mes, con sólo hacer dos o tres clics desde la configuración de nuestra cuenta y, en caso de seguir adelante, debemos tener en cuenta que el contrato nos ofrece una renovación tácita, hasta que no digamos lo contrario, cobrándosenos de nuevo los 19,95 euros 36 euros (o la tarifa que corresponda si es que hay cambios) en la fecha en la que nos dimos de alta.

Conocidas todas las ventajas sobre Amazon Prime, ya puedes estar preparado para el próximo Prime Day. Si no eres usuario, ya tienes todos los datos para saber si te interesa serlo y si querrás renovar tras el mes de prueba. En nuestra opinión, estamos ante un servicio que, en conjunto ofrece muy buena calidad, incluso en el servicio al cliente, y que costaría mucho más caro si sumamos varios de los servicios que se incluyen en Prime proporcionados por otras empresas: sumar un Spotify, un Netflix, un Flickr de pago y un Premium de PcComponentes, por ejemplo, se nos iría, muy, muy por encima, y aquí lo tenemos todo por apenas 36 euros.

Tienes más información sobre Prime en Xataka y en la web de Amazon.